Plagas Rastreras, Medidas de Control.

Tratar el tema de plagas rastreras involucra a una gran cantidad de organismos pertenecientes a diferentes grupos, tales como insectos, arácnidos y mamíferos.

Entre los que encontramos cucarachas, hormigas, tijerillas, pescaditos de plata, grillos, roedores, arañas, alacranes, etc., todas ellas con amplios rangos de adaptación al medio urbano, casas, oficinas, hoteles, almacenes, fábricas, etc., todos los espacios son viables para ser habitados por estos organismos invasores.

Si tomamos como ejemplo una fábrica, las medidas de control se deben de aplicar desde la recepción de materia prima, almacén de materia prima, área de proceso, almacén de producto terminado, distribución, punto de venta, además de considerar los medios de transporte.

Todos estos espacios se deben de mantener libres de la presencia de estos organismos, por lo que es recomendable, en primer lugar de evitar su entrada. En el caso de los edificios se deberán de poner barreras, como sería el caso de cortinas de aire, antecámaras, mallas, tejidos metálicos, trampas de luz, éstas últimas para el caso de insectos voladores.

Es importante tener presente la conveniencia de mantener una buena comunicación con los encargados de establecimientos aledaños, así en conjunto establecer un sistema, que incluya inspecciones periódicas, además de un plan de acción que permita a todos un buen control de las plagas.

En caso de que la plaga ya se encuentre presente dentro de las instalaciones, las medidas para la erradicación de la misma deben comprender la implementación de controles químicos, físicos, biológicos y culturales, es decir de un control integral, para lograr óptimos resultados.

Para el uso de productos químicos, se debe de contar con la asesoría de personal altamente capacitado en la aplicación de los mismos, mantener los equipos limpios, libres de residuos. Tanto el equipo como los plaguicidas deberán de estar almacenados bajo condiciones de seguridad y sólo tendrán acceso a los mismos, el personal especializado, con la finalidad de evitar contaminación a otros medios. También se deberá de consultar el Catálogo Oficial de Plaguicidas publicado por la Comisión Intersecretarial para el Control del Proceso y Uso de Plaguicidas, Fertilizantes y Sustancias Tóxicas (CICOPLAFEST), con la finalidad de verificar que se utilicen cumpliendo con las regulaciones pertinentes.

Los sistemas de control de plagas deben de contar con la aprobación de la Dirección General de Salud Ambiental de la Secretaria de Salud, que tiene como función contribuir a la disminución de riesgos a la salud de la población en general y del personal ocupacionalmente expuesto, ocasionados por el uso y manejo entre otros productos de plaguicidas. Es importante tener un archivo donde se registre todas las prácticas relacionadas con el control.

Aun cuando las medidas tomadas para impedir el acceso a las plagas sean eficaces, puede darse el caso que los proveedores no tengan un control adecuado, por lo que las plagas pueden entrar a las instalaciones junto con la materia prima, es por esto que también se debe de considerar los empaques, ya que es común que se escondan entre estos cucarachas, cochinillas, gorgojos, roedores, etc.

Por otro lado, como medidas para evitar la proliferación de las plagas se debe de tener control de los residuos de alimentos, de agua estancada, basura y materiales amontonados en los rincones y pisos, armarios y equipo en las paredes, en fin, en cualquier lugar donde se pueda dar acumulación de desechos y polvo.

El control de plagas rastreras involucra el uso de agentes químicos y métodos de aplicación específicos para éstas. En el caso de los insectos se asperja plaguicida de efecto residual, en ranuras y grietas del piso, en la base de equipos pegados al piso, rincones, elevadores y cualquier sitio susceptible a ser habitado por la plaga.

Si la plaga se encuentra en contacto con materia prima de alimentos, se deberá de usar productos autorizados, tomando las medidas pertinentes para no contaminar los alimentos ni afectar al personal que ahí labore, de hecho se recomienda que éstos evacuen las instalaciones por un período de 24 horas.

El tipo de insecticida, ya sea residual o de contacto, también dependerá del sitio de aplicación, por ejemplo, los residuales nunca se aplican en equipos, materias primas o empaque de alimentos.

El control de arácnidos requiere de otro tipo de productos.

Para controlar roedores (ratas, ratones, tusas, etc.) se requiere de un programa muy específico, que considere:

• Barrearas perimetrales que impidan el acceso

• Mantener libre de basura el exterior e interior de las instalaciones

• Inspecciones periódicas

• Uso de trampas y cebos

Las inspecciones periódicas en las áreas externas proporcionaran información sobre la especie de roedor, rutas y distribución de la población, lo que permitirá determinar tipo y cantidad de veneno a usar.

Dentro de las instalaciones se recomienda el uso de trampas mecánicas, éstas pueden ser de sistema de resorte, abiertas o cerradas, colocadas en los sitios donde se ha observado la presencia de roedores, que deberán de limpiarse todos los días por personal especializado.

Redacción TECNO CONTROL URBANO

Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.